Otra industria, que por cierto ya había reflejado pérdidas en 2019, es la de la construcción, por un lado, las obras públicas y grandes contratos se asignaron a constructoras amigas del gobierno federal de forma directa, es decir, no se hicieron licitaciones públicas, contraviniendo lo establecido en la Ley de Obras Públicas vigente; estos contratos siguen vigentes hasta la fecha, desplazando a un número importante de constructores no beneficiados y que hasta la fecha no han recibido ningún tipo de contrato; los despidos de personal serán enormes. Una industria ligada a la de la construcción es la de los Bienes Raíces, la comercialización de estos bienes ya empezó a flaquear, la detención del flujo de efectivo es una realidad, la intención de compra de un departamento o una casa se verá trancada y por otro lado el cobro de rentas también; si a esto se le suma el incremento de nivel de riesgos a los créditos hipotecarios, el resultado será un cierre casi total de esta industria en por lo menos nueve meses cuya recuperación será muy lenta.
La industria de la transformación también sufre las consecuencias de la contracción económica, esto al no explotar ni el 60% de su capacidad instalada y como ya se comentó, sin ingresos suficientes, no habrá forma de mantener los egresos, por ello su primer efecto será, la disminución de nómina, generando desempleo masivo, falta de liquidez y disminución del flujo de efectivo, todo lo anterior tendrá efectos negativos en el Sistema Financiero, hoy los bancos están trabajando de manera parcial, impidiendo la captación de operaciones bancarias y la colocación de capitales, incluyendo préstamos hipotecarios, emisión de tarjetas de crédito y financiamiento vehicular
Otra industria que manifestará grandes pérdidas es la de la educación, me refiero a las de la iniciativa privada; los servicios educativos deberán migrar a la modalidad On-Line generando costos no previstos, pero el punto crítico será el crecimiento de la cartera vencida, un estudiante que además trabaja, sin empleo no podrá pagar el colegio al igual que un padre desempleado.
El escenario es terrible y muy cierto, la Secretaria de Economía debe trazar pronto un plan que junto con la Secretaria de Hacienda brinden el apoyo urgente a las MiPYMES y eviten su cierre y los efectos negativos en la economía del país. Es notorio quiénes serán los grandes perdedores, las empresas grandes será tema de otra nota.