LA GESTIÓN DE RIESGOS EN UN MUNDO CAMBIANTE
Por: Darío Loria Centeno
Nos acercamos a la recta final del 2024, un año marcado por profundos cambios en la arena política y económica. El nuevo panorama legislativo ha generado dinámicas inéditas en la discusión y aprobación de iniciativas, mientras que la llegada de la primera mujer a la Presidencia de México representa un hito histórico. En paralelo, el proceso electoral en Estados Unidos ha estado cargado de polarización social y tensión comercial, particularmente con Asia, con miras a revisar el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Estos eventos recientes resaltan la importancia de mirar hacia atrás, a los últimos cuatro años. Recordemos la llegada de la pandemia y la escalada de conflictos armados en Europa del Este y Medio Oriente, que alteraron las cadenas de suministro, cambiaron los esquemas de trabajo y pusieron el foco en la sostenibilidad ambiental. Esta mezcla de factores hace evidente la necesidad de valorar la gestión de riesgos como una herramienta clave en la planeación estratégica de las empresas no solo para mitigar los riesgos, sino también para identificar oportunidades y generar un impacto positivo en las comunidades donde operan.
¿Qué entendemos por riesgo empresarial?
Existen múltiples enfoques sobre lo que constituye el riesgo empresarial. Para esta publicación, adoptaremos la definición de la Egade Business School del Tecnológico de Monterrey: “El riesgo empresarial son situaciones, tanto internas como externas, que podrían afectar los objetivos de una organización, generando incertidumbre y afectando sus recursos y el cumplimiento de metas”.
Bajo esta perspectiva y reconociendo un entorno de cambio constante, es imperativo que las empresas abandonen la idea de que funcionan como unidades aisladas del mundo exterior. Aquí analizamos algunos de los riesgos externos más significativos que han impactado y seguirán impactando la operación y sostenibilidad de las empresas.
Principales riesgos externos en 2024
1. Cambio climático y la adaptación empresarial
El cambio climático ya es una realidad innegable. El Informe de Riesgos Globales 2024 del Foro Económico Mundial señala que los riesgos ambientales, como inundaciones, incendios y olas de calor extremas, encabezan la lista de amenazas. Estos fenómenos no solo afectan la calidad de vida, sino que también exigen cambios en los modelos de producción, almacenamiento y distribución de mercancías, lo que puede traducirse en mayores costos para las empresas. La capacidad de identificar y prevenir estos riesgos será crucial para mantener la competitividad.
Además, la regulación ambiental se intensifica a nivel federal, estatal y municipal, lo que requiere que las empresas estén en sintonía con las normativas para evitar sanciones y aprovechar incentivos.
2. Cambios en la arena política y sus implicaciones económicas
Para finales de 2024, más de 70 elecciones se habrán celebrado a nivel mundial, lo que traerá consigo ajustes en la política pública, la asignación presupuestaria y el control de la inflación. Dado que muchas empresas operan globalmente, es esencial monitorear de cerca las decisiones políticas que podrían afectar el entorno económico, especialmente en términos de regulaciones, impuestos y tratados comerciales.
3. Disrupción tecnológica y los riesgos de ciberseguridad
La transformación digital ha abierto innumerables oportunidades para las empresas, pero también ha expuesto nuevas vulnerabilidades. La creciente dependencia de la inteligencia artificial y la recopilación masiva de datos han creado riesgos significativos en términos de ciberseguridad, como lo advierte la Comisión Federal de Telecomunicaciones. Las empresas, especialmente las más pequeñas, se ven particularmente afectadas por estas amenazas, lo que puede dañar gravemente su reputación y estabilidad operativa.
4. Dinámica laboral y su impacto en la competitividad
El mercado laboral también ha experimentado una transformación significativa desde la pandemia. Según el estudio “Panorama de las Vacantes” del Instituto Mexicano para la Competitividad y Coparmex, las preferencias de los trabajadores han cambiado, dándole mayor valor al equilibrio entre la vida personal y profesional. A su vez, la demanda de nuevas habilidades digitales ha generado dificultades en la contratación y retención de talento, afectando a más del 75% de las empresas en México. Este es un riesgo que, aunque en parte es interno, también está relacionado con factores externos como los cambios sociales, políticos y tecnológicos.
Convertir los riesgos en oportunidades
Aunque estos riesgos pueden parecer abrumadores, es fundamental reconocer que también representan oportunidades. Las empresas que gestionen eficazmente sus riesgos podrán no solo mitigarlos, sino también transformarlos en ventajas competitivas. Para ello, es crucial contar con las herramientas adecuadas, como la asesoría de despachos especializados y la adopción de metodologías de evaluación y monitoreo de riesgos.
Reflexiones finales
La gestión de riesgos externos ya no es una opción, sino una necesidad para cualquier empresa que aspire a la sostenibilidad y el éxito a largo plazo. A continuación, comparto algunas reflexiones clave:
- Apoyo a las PYMES: En un país donde el 98% de la estructura productiva son PYMES, es crucial desarrollar estrategias que ayuden a este sector a enfrentar de manera efectiva los riesgos externos.
- Sustentabilidad como eje central: Los modelos de sostenibilidad no solo contrarrestarán los efectos del cambio climático, sino que también ofrecerán una mayor rentabilidad y mejor reputación a las empresas que los adopten.
- Vigilancia y colaboración en políticas públicas: Es vital que los organismos empresariales monitoreen los cambios externos y trabajen en la construcción de políticas públicas que no solo aborden los problemas sociales, sino que también fortalezcan la prevención de riesgos empresariales.
- Monitoreo constante: Lo que no se mide, no se puede mejorar. Las empresas deben adoptar tableros de monitoreo y evaluación de riesgos para gestionar eficazmente su entorno.
