El Pacto Fiscal Rompiendo la Federación
México se encuentra al borde del mayor colapso de su historia, no basta enfrentar la peor pandemia sin estrategias sólidas ni confiables, tampoco basta con vivir la peor etapa de PEMEX, con un barril de petróleo cuyo precio es casi cero; tampoco basta con enfrentar la mayor crisis de violencia en todo el territorio, con la probabilidad de llegar a 10000 víctimas producto del crimen organizado en tan solo cuatro meses; por si fuera poco, el cierre de muchas empresas micro, pequeñas y medianas y en consecuencia el desempleo que traerá consigo mayor pobreza y la más grande desaceleración económica no vista en muchos años y si a esto se le suma la puesta en libertad de más de 15000 presos en la primera etapa, derivado de la nueva Ley de Amnistía, con lo cual se incrementarán los índices delictivos en todo el país; pues así, en este escenario, México se encuentra a punto de dejar de ser lo que hasta hoy conocemos como República Mexicana.
Al día de hoy, 6 Estados de la República amenazan con abandonar a la Federación y en total son 21 los Estados que se están organizando para crear un bloque en contra del gobierno errado de un Presidente incapaz, necio y con un dejo de corrupción peor al de los gobiernos anteriores. Todo lo anterior obedece a la inconformidad que existe por el Pacto Fiscal; por principio, Nuevo León, Jalisco, Michoacán, Chihuahua, Coahuila y Tamaulipas han manifestado su descontento por la falta de apoyo del gobierno federal para enfrentar la actual pandemia.
Estos seis Gobernadores solicitaron la revisión del Pacto Fiscal, lo cual fue negado por el Ejecutivo Federal, la solicitud consistía en modificar el retorno de las aportaciones que los Estados dan a la Federación y que esta fuera mayor a la actual, es decir, al día de hoy, por cada 100 pesos que un Estado aporta a la Federación, esta solo les regresa 15 con pesos y 5 pesos a los Municipios, solicitando que por cada 100 pesos, la Federación se quede con 60 pesos, los Estados 30 y los Municipios 10; por supuesto, también la inconformidad radica en que en la actualidad existen Estados que aportan ingresos muy bajos a la Federación o hasta cero, como es el caso del Estado de Morelos, quien además requiere de apoyos extraordinarios para poder combatir el crimen organizado de su territorio. Como resultado de lo anterior, la Federación se queda con el 80% de los ingresos de los Estados en general, recursos que en su mayoría son mal aplicados, ya que el Ejecutivo Federal los utiliza para cubrir sus programas clientelares o para comprar estadios de base ball o inyectar recursos a empresas en decadencia como PEMEX, la cual cayó a bonos basura; o apoyar el proyecto la construcción de dos bocas, el cual se ha multicomentado, no es sustentable ni sostenible y que solo es un desperdicio de recursos, cuando en este momento es urgente que estos recursos se destinen para atender la emergencia de salud.
Todo lo anterior violenta por mucho lo establecido en el Art. 40 CPEUM, ya que si bien es cierto es voluntad del pueblo mexicano constituirse en una República, también es cierto que los Estados son libres y soberanos en todo lo concerniente a su régimen interior, con ello, en teoría, podrían disponer de sus ingresos al 100% para ser utilizados en el desarrollo de sus propias entidades; así mismo pone en riesgo y contradice lo establecido en los Arts. 42 y 43 de la CPEUM, que indica que los Estados por voluntad propia se han unido para crear una Federación en igualdad de circunstancias y no al servicio de la Federación como subordinados y que hoy esto se traduce en servir al Presidente.
Ahora bien, dadas las circunstancias los Gobernadores pueden ampararse ante el Art. 46 CPEUM, que a la letra dice “Las entidades federativas pueden arreglar entre sí y en cualquier momento, por convenios amistosos, sus respectivos límites; pero no se llevarán a efecto esos arreglos sin separarse de la Federación . . . (sic)”, las condiciones están dadas, a la fecha, el Presidente mantiene una terrible relación con Gobernadores, Alcaldes, Presidentes Municipales y por si esto no fuera poco, con algunos de los integrantes de su Gabinete y con los integrantes de su mismo partido político, con todo ello, México vive un inestabilidad política de la cual el Presidente ha perdido el control, sus decisiones sin acierto que se han convertido en errores irreparables, con consecuencias alarmantes para el país, aquí cabe mencionar, que no es lo mismo ser candidato u oposición que gobernar; gobernar sin rumbo, sin considerar las recomendaciones de sus asesores, por no escuchar, teniendo un pensamiento de que México es él, haciendo lo que él quiere, como lo quiere y cuando él quiere, todo esto, le da las facilidades a los Gobernadores descontentos, para que formen un bloque que no había existido en México.
Concluyendo, primero, podemos decir que solo es necesario el pronunciamiento de un solo Gobernador ante su congreso, que es necesarios abandonar a la Federación por todas las causas expuestas anteriormente y esto será motivo de la desaparición del país que hoy lo conocemos; segundo, con la salida de un solo estado de la Federación nuestro país cambiará severamente y; tercero, Es necesario que el Presidente acceda a la solicitud de los Gobernadores y con ello mantener la unión de la Federación y evitar una crisis aún mayor.