La Animadversión del Presidente a sus Servicios Públicos

Siendo Presidente electo, el 15 de julio de 2018, AMLO presentó sus 50 medidas de austeridad, mismas que no en su totalidad son erróneas, sin embargo, algunas muestran claridad del desconocimiento de la administración de un gobierno como lo establece en su medida 10, que indica la no adquisición de sistemas de cómputo; otras medidas muestran un rechazo hacia el trabajo de los servidores públicos, tal es el caso de su medida 16, donde elimina la caja de ahorro especial; o la medida 21 donde indicó que se reduciría la plantilla del gobierno en un 70%, con ello disminuir los gastos de operación; o la medida 22 donde se establece que se reducen los sueldos de los Servidores Públicos de estructura en un 50%; así mismo, la medida 27 donde anuncia que las labores de los Servidores Públicos serán de lunes a sábado; sus medidas 41 y 42 que indican el deber de cuidar los bienes de oficina y evitar gastos de oficina innecesarios, medidas que a la fecha rayan en lo ridículo y absurdo, específicamente en las Secretarias de Economía y del Trabajo.

A 19 meses de que AMLO ganara las elecciones en México, donde uno de los pilares de la misma fue la “austeridad republicana” con la cual al inicio de su gobierno se aplicaron algunas acciones validas como la disminución de sueldos a los funcionarios públicos y homologar un catálogo de sueldos adecuado y justo en el servicio público, medida que por supuesto parecía ser el inicio de un gobierno que cumpliría con las promesas de campaña, promesas que por supuesto no referían la baja de personal clave en las instituciones públicas, personal operativo que por sus propias características era necesario, por ejemplo, de diciembre de 2018 a enero de 2019, las bajas de personal en el IMSS sumaron 12,397 empleados, situación que no está por demás mencionar, son necesarios al día de hoy para poder enfrentar la pandemia del COVID 19 y que para males, el Presidente lo resolvió trayendo a más de 585 médicos cubanos, haciendo de lado la capacidad, conocimientos, habilidades y compromiso de los médicos mexicanos desplazados en 2019, por si fuera poco, el INSABI reportó el 8 de junio de 2020, un pago por 135 MDP por la contratación de médicos cubanos más lo que se acumule al día hoy, en esa misma fecha los médicos mexicanos, en diferentes hospitales y centros de salud, manifestaron su inconformidad por la falta de preparación de los médicos cubanos, quienes incluso demostraron desconocimiento en el manejo de procedimientos básicos de enfermería; la violación al Art. 32 Constitucional, en su último párrafo “Los mexicanos serán preferidos a los extranjeros en igualdad de circunstancias . . . (sic)”; entre otras anomalías en el desempeño de sus funciones.

En otro escenario, el jefe del ejecutivo en su informe del 1 de abril, anunció que como parte de su propuesta para enfrentar las diferentes crisis que nuestro país padece, eliminaría los aguinaldos desde el nivel de subdirección hasta la presidencia, medida que demuestra una enorme incapacidad para gobernar y enfrentar los momentos de crisis, medida que además es anticonstitucional, la cual se prevé en el Art. 123 C.ap. A y B; Art. 127 C., en el Art. 87 de la LFT y en el Art. 42 Bis de la LFTSE, toda vez que el aguinaldo es un Derecho Adquirido e irrenunciable.

En otras medias que denotan acciones tendientes a lo ridículo y ya mencionada en el primer párrafo de este artículo, son las “medidas de austeridad 41 y 42” donde en la Secretaria de Economía se retiran 3 de cada 4 computadoras, peor aún, pretende que los trabajadores compren sus equipos de trabajo, violatorio a lo establecido en el Art. 132, f. III y IV de la LFT, así mismo, esta medida ha sido imitada por la STPS al retirar computadoras y limitar el consumo de agua de garrafón y electricidad, esta última al prohibir cargar sus celulares en las instalaciones de la dependencia, medida por demás ridícula; una medida más es la de cancelarles plazas de base a funcionarios y hacerlos firmar nuevos contratos en los que son reconocidos como trabajadores eventuales para lo que resta del año.

La cereza del pastel se plasma en los oficios 307-A 1205 firmado por Víctor M. Mojica Vilchis, Subsecretario de Egresos Unidad de Política Y Control Presupuestario, de fecha 10 de julio y el 700.2020-613 de fecha 15 de julio del 2020, firmado por Thalía Concepción Lagunas Aragón, Oficial Mayor de la SHCP; en el oficio 307-A, en su numeral 1 se indica que con fecha 16 de julio de 2020 queda disponible la referencia número 067001718 y la cadena de la dependencia número 0028514APORTA1, “que permitirá” a los servidores públicos con nivel de Subdirector a Presidente realizar aportaciones de forma voluntaria. Por otra parte, el numeral 2 indica, para aquellos servidores públicos que de manera “voluntaria” quieran realizar aportaciones, se anexa la referencia de porcentajes progresivos.

Con estas medidas de austeridad, se demuestra la falta de creatividad por parte del ejecutivo para enfrentar de manera efectiva las diferentes crisis que enfrenta el país, así mismo, es claro que los proyectos clientelares del jefe del ejecutivo están por encima de todo y también es claro que las finanzas del país están en quiebra y para ello, la única solución es seguir exprimiendo los ingresos de los servidores públicos, ya que la invitación a realizar aportaciones voluntarias pareciera ser solo eso, un apoyo voluntario, es claro que se hará obligatoria su observancia por temor a represalias; la situación de los servidores públicos se encuentra en estado de indefensión, ya que estas medidas no solo atentan contra el desempeño laboral y los resultados que los ciudadanos esperan, también atentan contra su economía y su estabilidad y permanencia laboral.

Es importante observar, si el Presidente desea resultados positivos, se debe apoyar en la operación de la administración pública, debe garantizar la asignación de los recursos suficientes para un buen desempeño de los trabajadores y dejar de exprimir los ya muy desgastados ingresos de los trabajadores de estructura de la administración pública, ya que su tabulador de aportación voluntaria va de un 5% hasta un 25% del sueldo mensual, que sumando al ISR y otras deducciones es muy probable que su sueldo neto corresponda a solo el 55 o 60% del sueldo real.

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