El aumento de las remesas: la falsa victoria del gobierno de la 4T
Por: José Luis Arenas López
¿Por qué el gobierno considera las remesas como un ingreso? Para responder esta pregunta, primero definamos dos conceptos básicos: qué son las remesas y qué es un ingreso. Las remesas son el envío de dinero de mexicanos (migrantes), fruto de su trabajo ejercido en EE. UU. o Canadá. El ingreso es una utilidad o ganancia que se obtiene como resultado de actividad comercial lícita, ya sea por ofrecer servicios o desarrollar productos. Por lo anterior expuesto, las remesas no son un ingreso. Para que el gobierno considere las remesas como un ingreso, estas deberían estar insertadas en el Plan de Desarrollo Nacional como una actividad de gobierno lucrativa, lo cual es imposible debido a sus características propias y en su caso, es un absurdo; dicho sea de paso, el jefe del Ejecutivo no se ha cansado de celebrar el incremento de las remesas año tras año como un logro de Estado y de su gobierno en beneficio de la población mexicana.
El primer semestre de 2023 se rompió el récord en captación de remesas, acumulando 30 mil 238 millones de dólares y para finales del mismo año, se captaron 67 mil 900 millones de dólares, de estas, el 95.5% provienen de Estados Unidos y el 1.6% procedentes de Canadá; lo restante, de otras partes del mundo.
Para México, las remesas son una fuente importante de recursos económicos y no de ingresos; esto significa que el ingreso lo obtiene el connacional como fruto de su trabajo, recursos que envían a sus familias en nuestro territorio, manteniendo el vínculo familiar a la distancia. Quienes reciben estos recursos reciben seguridad, misma que representa una mejor calidad de vida, logrando alejarse de la pobreza extrema, la cual se encuentra presente en una gran extensión del país.
¿Por qué las remesas se han incrementado? Según la Secretaria de Gobernación, a finales de 2018 se estimaban 38.5 millones de mexicanos migrantes a EE. UU. y a partir de este gobierno, esta cantidad ha incrementado en 800 mil migrantes mexicanos por año, lo cual resulta lógico en el aumento de las remesas. Es decir, más migrantes, más mexicanos trabajando en EE. UU. y con ello, más remesas.
¿Qué es la migración? Además de ser un fenómeno social, también se refiere al desplazamiento de personas de su lugar natal a otro país buscando una mejor calidad de vida, pero, ¿por qué se incrementa la migración? La realidad es que existen muchos factores: cambio climático, conflictos bélicos, la problemática política interna, inseguridad y el crecimiento del crimen organizado. De todo lo anterior, se puede concluir que la razón más importante por la que se abandona el país de origen, es sin duda la falta de oportunidades, es decir, la falta de empleo y en su caso, la falta de empleos bien remunerados.
Donald Trump refirió: “la migración es la consecuencia de la incapacidad de los gobiernos para generar fuentes de empleo seguros y bien remunerados, mismos que permitan a sus ciudadanos permanecer en su lugar de origen”.
México sufre una época violenta, al grado que el campo, las carreteras y las grandes ciudades, han sido secuestradas por el crimen organizado. Acciones como el cobro de piso, los secuestros, las extorsiones, el robo de mercancías y camiones de carga y el pago al “segundo gobierno”, han puesto a los ciudadanos en jaque, además de que es claro que estas acciones violentas no han sido atendidas por parte del Estado para garantizar la seguridad y que se propicie el sano desarrollo y la competencia de las empresas, los comercios y el campo que han traído como consecuencia el terror de los habitantes y con ello, la búsqueda de mejores condiciones de vida, provocando la migración.
La política del presente gobierno “abrazos y no balazos”, es sin duda la peor estrategia de seguridad en la historia del país; es claro que no hay nada de que sentirse satisfechos, ni nada que celebrar con el aumento de las remesas; más bien, será necesario reemplazar la presente política por otra que garantice no solo la seguridad, sino también la creación de fuentes de empleo reales, permanentes y bien remunerados, así como garantizar el sano desarrollo del campo y el traslado de mercancías. Con lo anterior, se lograría el asentamiento seguro de los pobladores y además, se sancionaría a todo aquel que atente contra la seguridad de los ciudadanos, ya sea en su persona, en sus posesiones y en su patrimonio.