Análisis de crecimiento y desarrollo entre el AICM contra Tocumen
Por: José Luis Arenas López
En la actualidad México cuenta con 76 aeropuertos comerciales reconocidos, además de contar con 40 aeródromos y 16 bases aéreas, con un total de 1714 pistas, de las cuales solo 243 están pavimentadas; el AICM durante el 2021 contó con 25,883,725 pasajeros nacionales y 10,172,889 pasajeros internacionales y en lo que va del 2022 se han movido 3.249,487 pasajeros en enero y en febrero 3,008,316, con un total de 19,451 vuelos en enero y 16,776 en febrero; de igual forma en este último periodo se registraron 255 y 278 vuelos de carga en enero y febrero respectivamente.
En México solo 10 aeropuertos mueven el 95% del total de la carga y es el AICM el que concentra el 55% de las operaciones, seguido del aeropuerto de la Ciudad de Guadalajara, el de Monterrey, Querétaro, entre otros.
La demanda de operaciones día, semana, mes, no cesan, el AICM registró sus mayores números de saturación desde 2013, teniendo un crecimiento constante anual entre el 3 y el 5%, es decir, en operaciones, cifras que llegan casi al tope de su capacidad instalada del aeropuerto.
En otros datos relevantes, el AICM es considerado el aeropuerto más grande de México y el que tiene registrado el mayor movimiento de mercancías en América Latina, tan solo en el primer tercio del 2021, se habían movido 150,879 toneladas de carga, cerrando el año con 567,779 toneladas, cantidades muy por encima del aeropuerto Guarulhos en Brasil, el Dorado en Colombia, el Jorge Chávez en Perú y el Tocumen en Panamá; en al AICM operan más de 50 aerolíneas, mantiene 35 mil fuentes de empleo directo y 15 mil indirectos, cuanta en sus alrededores con 14 hoteles, cuenta con 33 puertas de embarque directo y 11 posiciones para salas móviles (7A/B/C, 14A/B, 16A, 19A/B/C/D y 36A) en la terminal 1 y en la terminal 2, 30 salas de embarque directo y 10 salas móviles. Haciendo un total de 63 puertas de embarque y 21 salas móviles con un total de 84 salas de operaciones aéreas.
Por su parte, el aeropuerto de Tocumen, es una de las terminales aéreas más importantes de América Latina, con una conexión a más de 70 destinos tanto en América como en Europa; es un aeropuerto en constante desarrollo, mantenimiento y crecimiento, en su segunda fase de expansión, creció un 50%, permitiendo para el 2012 manejar hasta 7 millones de pasajeros por año, en 2020 tuvo una caída importante derivada del COVID-19 y en 2021 logró reactivar 68 de los 90 destinos operados en 2019, teniendo activas 19 aerolíneas.
Panamá ha llevado un proyecto de desarrollo para la movilidad de pasajeros y mercancías en América y año con año se posiciona en mejores lugares, esto es, hasta antes del régimen de Maduro, quizá el aeropuerto más importante del continente era el Simón Bolívar, la crisis política de Venezuela también afectó estos servicios dejando muy atrás a esta terminal; después del AICM, el Dorado se ha posicionado como la segunda terminal aérea de América, sin embargo, la competencia que da Tocumen es muy amplia, estando a muy poco de colarse en tercer lugar desbancando al aeropuerto Jorge Chávez de Perú y siendo posible que con tres pistas supere por mucho a el Dorado en el mediano plazo.
En la actualidad, Copa Airlines es la aerolínea base de Panamá y cuenta con una flota de 85 aeronaves, con más de 31 rutas, contra 96 aeronaves de Aeroméxico con 89 destinos, datos relevantes entre dos países muy diferentes, mientras que México tiene una población de casi 130 millones de habitantes, Panamá apenas llega a los 4.4 millones, marcando con ello, grandes diferencias en cuanto a necesidades de transporte aéreo.
Para el cierre de 2021, se registraron movimientos por más de 202,742 toneladas en mercancías, tan solo un poco más de un tercio de lo que movió el AICM en el mismo periodo, sin embargo, es relevante considerar que para el 2022, Tocumen espera un crecimiento histórico, mismo que espera romper su propio récord, lo anterior se logrará sin duda, ya que en 12 meses recuperaron el 85% de su conectividad, asegurando una importante solidez financiera.
Se tiene en construcción ya la tercera pista, en la actualidad ya se encuentra entregada la Terminal 2 y en conjunto cuenta con ocho posiciones remotas y 54 puertas para embarque y desembarque de pasajeros con un total d 62 puentes; es un aeropuerto muy prometedor y se espera poder operar hasta 33 millones de pasajeros anualmente en el corto plazo, es importante señalar que la ubicación geográfica del aeropuerto Tocumen es privilegiada y se vuelve el principal competidor para el AICM, ya que juega un papel importante en la cadena logística, así mismo, habrá que resaltar que su terminal de carga es una de las más modernas, colocando a Panamá como el principal centro de transbordos de mercancías en el continente; a esto, no podemos ignorar la importancia del Canal de Panamá y que en conjunto forman la mejor de las mancuernas en el tema de movilidad de mercancías.
Una realidad es que el AIFA no podrá ni en el mediano plazo brindar los servicios que el AICM ofrece, siendo esto una desventaja considerando el crecimiento y desarrollo del Tocumen, el AIFA apenas cuenta con siete puertas, la carrera contra el desarrollo aeroportuario es evidente y denota con claridad que el Tocumen nos lleva la delantera, si bien es cierto, México es el principal receptor de mercancías en América Latina, pero también es cierto que el AIFA lejos de ser una ventaja es dar un paso atrás, la urgencia de México para no perder el liderazgo se ha mermado significativamente; un aeropuerto es un proyecto integral que debe desarrollar en paralelo cada uno de sus subproyectos y pensar en la movilidad de pasajeros y mercancías, adecuando los recursos necesarios para satisfacer cada uno de los requerimientos, los caminos y los servicios de transporte, tanto para pasajeros como para mercancías son vítales, la edificación de hoteles y almacenes para mercancías son indispensables, mismos que por ahora el AIFA no ha logrado satisfacer y que por lo menos tardará no menos de un año para lograrlo, la punta del liderazgo está en juego y solo un proyecto de desarrollo integral tendrá la última palabra.
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